Este
tipo de bosque está disperso en forma de manchas aisladas.
Este tipo de bosque se puede encontrar sobre distintos
tipos de roca: ígneas (magma o roca fundida), metamórficas
(rocas formada a partir de otras rocas) y sedimentarias (formadas por acumulación de
sedimentos –partículas de diversos tamaños que son arrastradas por el agua-); pero también se encuentra
sobre suelos originados por ceniza volcánica como el andosol (suelos de origen volcánico de color
obscuro y muy porosos).
Algunos de los cambios estructurales que sufren este
tipo de Arboles en México se derivan de acuerdo a las características generales
de la familia a la cual pertenezcan ya que los encinos se pueden agrupar en
encinos blancos, en encinos rojos y en encinos negros o de copa dorada, estos
últimos restringidos a Baja California y Sonora. Los encinos blancos tienen bellotas dulces o
ligeramente agrias que maduran en seis meses. Los encinos rojos y negros tienen
bellotas amargas que tardan 18 meses en madurar.
En la actualidad experto en Ciencias Biológicas de la
UNAM explicaron que tanto los pinos como los encinos, especies forestales de
gran relevancia para el ecosistema, son las más afectadas por el problema del
cambio climático en el planeta, ya que se han registrado fluctuaciones de
temperatura y humedad de menor magnitud en los últimos años.
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